Andrés Manuel López Obrador, en la Presidencia de la CELAC, llamó a sustituir la OEA con la CELAC. Desoído el reclamo continental de que el tristemente uruguayo Luis Almagro, cese en su animosidad contra los pueblos e insuficiente el influjo del Deep para desperfilarlo, no queda otra que ir por todo.
Almagro se
lleva la OEA a su tumba política, mientras defecciona en la crisis haitiana por
el magnicidio cometido por paracos colombianos y contratistas yanquis, silencia
a gritos su nefasto rol en el armamento macrista de la represión del golpe
fascista en Bolivia, pierde con Evo Perú y Blinken no se decide a cortar por lo
sano y aprovechar las denuncias de Luis Arce contra el déspota de la OEA, para
facilitar su destitución antes de que Almagro destituya con sus horrores al antiguo
ministerio de colonias yanqui, llamado OEA.
Desde
Uruguay, puede incidir el Frente Amplio, y debe, en apoyo de la necesaria
iniciativa que tomó México y con López Obrador en la Presidencia, toda la
CELAC.
Los nombres
de Erlich y de Carámbula no están lejos de quien puso al traidor al frente de
la OEA. Ya es tiempo de que lo saque. El Pepe Mujica podría dedicarle un par de
esas invectivas que reservaba a los compañeros, la vieja del tuerto, el loco
como una cabra, la que se cae a pedazos, el que debe renunciar, especialmente
ésta: “el que debe renunciar”, con algo más de esa chispa que tiene el Pepe,
cuando no se pone en amigo para excusar a Piñera o en Stendhal para despedirse amorosamente
epistolar de su Luis Almagro.
Hoy sería
bien oído hasta por los yanquis que los librara del bagayo. Y el Frente Amplio debería
hacerlo, muy especialmente, ante la escalada de abyecto atropello imperialista a
Haití, en honor a la memoria del grandísimo Guillermo Chiflet, que entregó su
banca, dignísimamente, para no ser cómplice del contubernio con los yanquis en
Haití.
En México,
también, se planea la negociación venezolana, incluso con participación de los
dueños de la tramoya de Guaidó. Es tan tímida la tentativa de Washington para
cooperar en algo, aunque más no sea de maquillaje, que el Quad para Afganistán
lo disfrazan de “apoyo militar desde fuera del país con bombardeos a los
talibanes”, no quieren parecer blandos, pero saben que el mundo sigue andando y,
si se cierran los ojos de la OEA, sigue andando sin ellos, igual que en Asia
Central y en Asia del Sur.
A falta de
cooperación en las cumbres, bueno es sentarlos a la realidad al menos en mesas
regionales.
En América,
por Venezuela, sólo intercede desde Europa, Noruega. Los yanquis no pueden para
esta ocasión contar con el obsecuente Sánchez, porque está totalmente ocupado en
defender al Borbón de los últimos escándalos de la monarquía. Por fin, Unidas
Podemos empieza a hacer Dos Tácticas enfrentando al establishment PSOE-PP, que
defienden al monarca hasta dar nauseas.
USA va a
tomar más en serio, de ahora en adelante, lo que manifieste la diplomacia
mexicana a través del canciller Marcelo Ebrad. Cuando éste dijo “Almagro”, no estaba
diciendo “toda la OEA”. Blinken perdió una oportunidad y es de esperar que haya
tomado nota. Bolivia se sumó a la iniciativa de México. Centro territorial y
frontera sur juntos. El desafío está planteado. Otra plataforma para relanzar
con Lula cuando vuelva a Planalto, el año que viene.
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